LA LEYENDA DEL HILO ROJO
Según una leyenda asiática existe un hilo rojo invisible que conecta a aquellas personas que están destinadas a encontrarse, a pesar del tiempo, del lugar, a pesar de las circunstancias… Cuenta que cada noche un anciano que vive en la luna sale en busca de las almas que están predestinadas a encontrarse en la Tierra y las va uniendo con un hilo rojo atado en su dedo meñique para que no se pierdan. El hilo siempre está presente, puede tensarse, estirarse o enredarse, pero nunca podrá romperse.
Para nosotros, lo más interesante de esta leyenda no es tanto que no podamos escapar al destino, si no la importancia de las relaciones. El hilo rojo simboliza el vínculo que existe entre dos personas, y no solo se refiere a nuestra pareja, sino también a todas las relaciones que podamos tener a lo largo de nuestra vida: pareja, amistad, hermanos, padres, amigos etc… Desde que nacemos siempre estamos interactuando, vamos estableciendo vínculos entre nosotros, uniéndonos con una especie de hilo rojo invisible. Algunas veces esas relaciones, pueden ser tensas, otras enrevesadas y otras más cercanas. Quizá, como dice la leyenda, ese lazo no se rompe nunca del todo porque forma parte de nuestra vida, aunque en algunos casos deberemos aprender a desenredar esos nudos y esas tensiones…en definitiva, manejar estas relaciones de una forma positiva para que se conviertan en un camino de crecimiento y bienestar.